lunes, 30 de agosto de 2010

"Usted debe terminar en el basurero de la historia"

Parrilli, durísimo contra Macri en la interpelación:










El lunes 23 asistió a la Legislatura porteña Mauricio Macri, procesado por las escuchas ilegales junto al ex comisario represor ‘Fino’ Palacios y al espía federal Ciro James, ambos detenidos.

Entre los bloques opositores se destacó nuestro diputado.



La sesión especial duró casi cinco horas. Terminada la corta exposición inicial de Mauricio Macri, en la que volvió a repetir su previsible “yo no fui” de siempre, la ronda comenzó con los cuestionamientos y las preguntas de los diputados de Proyecto Sur, el principal bloque de la oposición en la Ciudad de Buenos Aires.

Con alguna que otra excepción, bastante menos incisivas fueron las intervenciones de otros bloques, como los de la Coalición Cívica, el kirchnerismo y el bloque Peronista, el ibarrismo, la UCR, el sabbatellismo, el Partido Socialista y por supuesto el bloque de De Narváez. De todas maneras, Macri evadió dar respuestas concretas y volvió a mostrarse como la pobre víctima de una “persecución política disfrazada de causa judicial” montada por el gobierno nacional, la SIDE y el juez Norberto Oyarbide. “Yo no lo condeno a Palacios”, llegó a decir Macri sin ponerse colorado...

El plato fuerte de la sesión fue la durísima intervención contra el jefe del PRO, su Policía Metropolitana y toda su política represiva que hizo nuestro compañero Marcelo Parrilli, cuya versión taquigráfica reproducimos aquí y que tuvo fuerte repercusión en todos los medios de comunicación.



Con Macri, siguen las tareas de inteligencia



“Buenos días, señor Jefe de Gobierno”, arrancó Parrilli. “Desde ya, no le voy a agradecer su presencia hoy aquí, no por una cuestión de cortesía o de descortesía, porque no creo que hoy sea cortés por venir aquí, ni haya sido descortés antes por no hacerlo. Me parece que lo que hoy lo trae por aquí es la crisis política.

“Voy a hacer una consideración y una pregunta, y me voy a guardar algún minuto para, en todo caso, después hacer una repregunta.

“Yo tampoco creo que usted sea básicamente negligente. Es cierto que su gestión no se caracteriza -ni aun dentro de la particular política que usted aplica- por los aciertos, pero el centro del problema me parece que es su política en materia de seguridad, caracterizada por un sesgo profundamente reaccionario y represivo.

“No se terminaron las tareas de inteligencia en el Ministerio de Educación con la salida de Ciro James, por lo menos la impronta en materia de obtener datos de inteligencia para después aplicar sanciones. Hoy, por ejemplo -usted lo sabrá-, hay trece colegios en la Ciudad de Buenos Aires ocupados por sus alumnos por problemas edilicios, de becas, etcétera. El día 19 de agosto se emitió un memorando, el Nº 912.750, firmado por el Director General de Educación de Gestión Estatal, Roberto Angrisani, dirigido a los directores de esos establecimientos, en donde les dan una serie de directivas acerca de cómo proceder en el caso de ocupación de los colegios.

“El punto 4.5, por ejemplo, dice que el director ‘debe hacer un listado lo más completo posible de alumnos y alumnas -se respeta el género (Risas)- que participen de la medida’. En el punto 5.1, le aconseja al director hacer denuncias policiales: ‘Las autoridades educativas, previa conformidad de las autoridades del área, con copia autenticada, etcétera, deberán efectuar una denuncia ante el organismo competente -la Policía Federal Argentina-, sobre el hecho de la toma y la posible configuración de un delito por parte de los participantes y padres de los menores por incumplimiento de los deberes correspondientes al ejercicio de la patria potestad’. Esas son todas tareas de inteligencia y vinculadas con la represión. En ese marco, se inscribe la Policía Metropolitana.



¿Va a echar o no a los genocidas de la cúpula de la Policía Metropolitana?



“Aquí quiero poner el eje en lo que me parece más importante”, siguió el diputado del MST-Nueva Izquierda. “Habrá mil efectivos, pero el carácter de una fuerza con organización piramidal no está dado por los cadetes, por los dragoneantes o por las líneas medias -y puede ser que sean excelentes personas-, sino que el perfil está dado por la cúpula, porque es la que dirige, la que da el contenido político y el perfil.

“Con respecto a esa cúpula, como ya se dijo acá, el 73 por ciento de los 52 altos oficiales, es decir 38, provienen de la época de la dictadura militar. Es decir, fueron destacados agentes durante el sistema del terrorismo de Estado, muchos de ellos en la Superintendencia de Seguridad Federal.

“No hay tiempo, pero de todas maneras le voy a hacer entrega del Nunca Más. Es un documento oficial del Estado argentino, elaborado por la Comisión Nacional de Desaparición de Personas. (Aplausos de la oposición.) Ahí se menciona a la Superinten-dencia de Seguridad Federal como uno de los principales centros de secuestro, tortura y exterminio de este país. Ahí estuvo detenido -y también está mencionado acá- nuestro Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, que fue secuestrado durante 32 días; después, siguió preso en La Plata. Ahí estuvimos los miembros del Centro de Estudios Legales y Sociales -también está acá- que fuimos ilegalmente detenidos. Le voy a dejar copia del expediente para que usted lo pueda leer, ya que aparentemente el ministro Montenegro no lee bien que fuimos ilegalmente detenidos en el año 1981.

“Ése es el perfil de la fuerza policial que usted ha constituido. Entonces, la pregunta no es si usted lo ratifica o si le parece compatible, porque tengo claro que no, sino si usted va a echar o no a Raúl Ricardo Ferrón y al resto de los 37 genocidas que hoy están en la cúpula de la Policía Metropolitana.”



La “respuesta” de Macri



“Señor legislador”, respondió el ingeniero interpelado. “Usted ha nombrado una serie de hechos y, si los menciona, es porque están comunicados. No son una práctica secreta de gobierno, sino una política de gobierno que cree en el respeto de la ley. Para nosotros, no todo da lo mismo. Todos debemos respetar la ley: los que tienen mucho y los que no tienen nada. La ley es lo más solidario que tenemos y lo que nos vincula; eso es lo que intentamos hacer.

“En lo que respecta a su denuncia, me sorprende que recién después de 30 años usted haga esta denuncia contra el señor Ferrón. Usted se tomó 30 años para acordarse de que el señor Raúl Ferrón tenía un problema con usted, o que usted tenía un problema con él. En el ínterin, este señor ha sido condecorado varias veces en su acción como policía en democracia y, en la última, por este gobierno (nacional), por el actual Jefe de Gabinete. Por lo cual nosotros vamos a proceder, como ya lo he ratificado, a echar a alguien cada vez que encontremos que hay razones valederas, no denuncias en abstracto que no tienen ninguna fundamentación.” (Aplausos del macrismo.)



Vamos a seguir militando por su destitución



Parrilli cerró entonces con firmeza su discurso: “Le quiero decir al señor Jefe de Gobierno que no estuve 30 años acordándome de Ferrón, ni hice un seguimiento de él. No tengo tan mal gusto. Pero casualmente, el primer día que fuimos a revisar los legajos de la gente designada en la Policía Metropolitana lo encontré ahí. Así que no es que tardé 30 años en hacer la denuncia. Quienes hemos militado en derechos humanos hemos exigido precisamente durante 30 años que secuestradores, torturadores y asesinos sean juzgados y condenados. En este caso, estamos pidiendo algo mucho menor: que no los nombre. Acá no nos movemos con criterios sanciona-torios. La denuncia no es en abstracto, y lo va a poder leer en el Nunca Más.

“No me sorprende lo que dice: es la ratificación de su política. Por eso, hago votos y, además de eso, vamos a seguir militando. Creo que la oposición de conjunto tiene seguir militando y reuniendo a la ciudadanía, a los trabajadores de la salud y de la educación, a las organizaciones de derechos humanos, a las agrupaciones vecinales y a todos los demás para que esta Comisión Investigadora que se va a constituir avance hacia el juicio político; para que el juicio político avance hacia su destitución, para que su destitución sea el final de su carrera política y para que usted termine en el lugar donde tienen que terminar y han terminado muchos de los que han llevado adelante políticas como la suya en este país: en el basurero de la historia.” (Aplausos de la oposición.)

El gran paro docente, la lucha de los estudiantes y el escrache a Macri de los bancarios del Ciudad abonan esa perspectiva.





El diputado del MST-Nueva Izquierda, Marcelo Parrilli, interpelando a Macri con el «Nunca Más» en su mano.



Foto: Paula Ribas / gentileza Télam


























viernes, 13 de agosto de 2010

Fuera Macri y su Metropolitana

Según se prevé, el jueves 12 la Legislatura vota crear una comisión investigadora. Ese día, mientras afuera el CADHU, MST, la CCC, Libres del Sur en Proyecto Sur, Ademys

y otras organizaciones populares realizamos una radio abierta, en la sesión Parrilli reitera la necesidad de destituir al jefe de gobierno y disolver su policía.



El 3 de agosto, la Comisión de Asuntos Constitucionales debatió diferentes alternativas ante la crisis con Macri y su gobierno. Allí nuestro diputado sostuvo lo siguiente:

«La posición de nuestro bloque, el MST, es echar a Mauricio Macri del Gobierno de la Ciudad por su política represiva. En ese punto gira nuestro proyecto de juicio político. Acusamos a Macri por mal desempeño en el cargo, por los episodios investigados en la causa de las escuchas, por toda su política de seguridad, por violar la propia Ley de Seguridad que está obligado a respetar, por haber formado la cúpula de la Policía Metropolitana con elementos provenientes de la dictadura genocida.

«Es un hecho muy grave que se dio cuando estas personas fueron nombradas y es ratificado al mantenerlas sus puestos, defendidas cotidiana-mente por el jefe de gobierno o sus ministros. El otro día, en una desafortunada intervención telefónica, el ministro de Justicia y Seguridad Guillermo Montenegro estaba defendiendo a una de las personas que nosotros cuestionamos, el comisionado Ricardo Raúl Ferrón. Defendía además un expediente de la peor etapa de la dictadura militar, que es modelo de cómo se atacó a las organizaciones de derechos humanos. Esto no lo digo yo: figura en el Nunca más, en el informe de la Comisión Intera-mericana de Derechos Humanos y en el Departamento de Estado de los Estados Unidos que, para el PRO, debería ser una autoridad casi suprema.

«Montenegro defiende a Ferrón, Mazzeo y al resto de la banda de secuestradores, tortu-radores, asesinos y corruptos que Macri colocó al comando de la Metropolitana. No son elementos ideológicos, como dijo el ministro. Todos tenemos ideologías, salvo los animales. Son hechos de la realidad, públicos y notorios, fácilmente constatables con observar los legajos. Por suerte, Macri y Montenegro no siguieron a la caída del Führer en Alemania. Si no, hubiesen puesto a los integrantes de la SS, que no tuvieron ni condena ni proceso, al comando de la nueva policía.

«La Ley de Seguridad establece que la Metropolitana es de proximidad, comunitaria y amiga del ciudadano, del habitante. Esa policía no cumple ninguna de esas funciones. Es un hecho brutal, que toda la oposición debe tomar.



Macri, similar a los nazis



«El juicio político es el camino más expeditivo para sacar a Macri y a su política, que se expresa también con las leyes que pretende para reformar el Código Contravencional sobre los trapitos, cuidacoches o motochorros, como los llama el PRO. Hace unos días repasaba el proyecto del Partido Nacional Socialista Alemán sobre tratamiento a los extraños a la comunidad, y la definición que los juristas de Adolfo Hitler dan en esa ley sancionada el 1º de enero de 1945 es muy similar a la que se desarrolla veladamente detrás de las figuras de trapitos o cuidacoches.

«Todas estas son causas para pedir que Macri y su política se vayan del Poder Ejecutivo, y con ellos se irán Montenegro y el resto.

«Acá tenemos un proyecto del macrismo -sumido en una profunda crisis-, que es un proyecto de juicio político para la absolución. Es lo mismo que si un fiscal realizara una denuncia en la que solicita que se compruebe la inocencia del denunciado. La denuncia carecería del impulso necesario, porque es un contrasentido lógico que la propia denuncia diga que esa persona es inocente. Si es inocente y no sospechamos nada, ¿para qué vamos a promover el juicio político? El juicio político del PRO es una simple maniobra para lograr una rápida absolución que beneficie al macrismo.

«El único fundamento serio de juicio político debe ser no solo la causa penal, sino también lo que ocurrió y ocurre con la Metropolitana y la legislación represiva que pretende sancionar el macrismo.

«De no prosperar nuestro pedido de juicio político, más allá de la opinión sobre la Metropolitana, el objeto que plantea el resto de la oposición en la comisión investigadora cubre los aspectos para nosotros decisivos.

«La oposición debe salir a ventilar esto en toda la Ciudad. No es solo un problema de acá adentro ni de contar votos: acá tenemos un aparato represivo dirigido por genocidas. Las escuchas no se acabaron con Ciro James y el Fino Palacios: siguen. Esos aparatos no se montan para ser desmontados ante el primer atrapado: siguen funcionando. Ferrón, Mazzeo y otros hoy nos están monitoreando desde la Metropolitana.

«Debemos avanzar, desde toda la oposición, en un juicio político que tarde o temprano vaya en dirección a la remoción de Macri y de su política. En conjunto, de manera unitaria, discutiendo democráticamente las mejores posiciones para avanzar en esta dirección: fuera Macri, fuera la Metropolitana, fuera su política represiva.»



No votarle ni una ley más



El jueves 5, Macri logró una ley clave para desviar fondos a través de Autopistas Urbanas, AUSA. Se la aprobaron el bloque K, PJ, UCR, ibarrismo, PS y una diputada sabbatellista. En contra votaron Proyecto Sur, la Coalición Cívica y Parrilli, quien planteó:

«Adelanto nuestra posición negativa. Por lo señalado sobre AUSA y su endeudamiento. Porque se van a desfinanciar los subtes, de los cuales se iban a construir 10 kilómetros por año. Y porque se le van a dar 600 millones de pesos a una empresa que desde hace tiempo no paga con dinero, sino con obras que son incontrolables para la Ciudad. La zanahoria, que serían las obras a realizarse en Educación, se deberían hacer con las partidas presupuestarias destinadas a ese fin. Este proyecto no debe ser aprobado por la oposición, porque se inscribe en el marco de la llamada ‘crisis institucio-nal’. Y el principal problema que tiene la Ciudad es Mauricio Macri…

«No le podemos dar a este jefe de gobierno 600 millones para que siga administrándolos y disponiendo de ellos en obras electorales, con absoluta arbitrariedad. Tampoco le podemos aprobar ningún proyecto de ley desde la oposición, si creemos efectivamente que la situación es grave, como todos decimos. No se lo puede seguir apoyando políticamente, aunque sea de forma indirecta. Y la manera de lograr la licencia de Macri es no votarle ningún proyecto hasta que se la tome.

«Hago hincapié en la oposición, ya que el miembro informante del oficialismo les agradecía una y otra vez; creo que seis veces, por haber trabajado en el proyecto y también les agradece de corazón -y quizás con alguna otra cosa más- que se lo aprueben.

«El oficialismo es minoría en esta Legislatura. El PRO no puede aprobar ningún proyecto si no es por medio del acompañamiento, que lamentablemente se realiza casi siempre como la sombra al cuerpo, de lo que llamamos la oposición pro PRO. Hay unos pro PRO históricos y, a lo mejor, hoy se suman unos pro PRO ocasionales… Si queremos que Macri se tome licencia, si estamos convencidos de la gravedad de los delitos que cometió, si consideramos que son causales de mal desempeño y si estamos a favor -vía juicio político o comisión investigadora que irremediablemente va a desembocar en juicio político- de que se vaya, no le podemos aprobar este proyecto.»



Sin tregua, hasta que se vaya



En principio, la comisión investigadora tendrá 17 miembros: 12 de la oposición (uno por bloque) y 5 del PRO. En medio de la crisis política, el desastre de Villa Urquiza suma otro motivo legítimo para echar a Macri y su política. Pero con «opositores» como los pro PRO que denuncia Parrilli, lograr que esa comisión investigue a fondo y acuse a Macri no será una tarea sencilla pero sí posible. Requiere que todos los trabajadores, jóvenes, vecinos y organizaciones democráticas y populares que ya no se bancan ser gobernados por este facho y delincuente político tomen la pelea en sus manos. A dar juntos esa lucha los convocamos desde el CADHU Y el MST-Nueva Izquierda.